2015 FF es el nombre del asteroide
que pasará cerca de nuestro planeta este viernes 12 de agosto de 2022. El cuerpo celeste ha sido clasificado por la agencia espacial norteamericana como potencialmente peligroso por su tamaño que oscila entre 13 y 28 m, similar a la de una ballena azul, con una velocidad de 33,000 km/h, es decir, unas 27 veces la velocidad del sonido.
2015 FF catalogado objeto potencialmente peligroso
La NASA marca cualquier objeto espacial como objeto cercano cuando se ubica a menos de 193 millones de kilómetros de la tierra, mientras que si se mueve en el rango de los 7,5 millones de kilómetros los clasifica como potencialmente peligrosos.
Una vez que han sido clasificados en este rango, los astrónomos los monitorean para conocer su trayectoria prevista e incluso determinar si será desviado por otro asteroide lo que podría ponerlos en curso de colisión contra nuestro hogar la Tierra.
El asteroide 2015 FF tiene un diámetro que oscila entre los 13 y 28 m y cuando se encuentre en el punto más cercano a nuestro planeta, a unos 4,3 millones de kilómetros, estará a poco más 8 veces la distancia media entre la Luna y la Tierra por lo que ha sido catalogado como un objeto potencialmente peligroso.
La importancia de monitorear las trayectorias de los asteroides
La NASA actualmente conoce la órbita de aproximadamente 28,000 asteroides que son monitoreados por el Sistema de Ultima Alerta de Impacto Terrestre de Asteroides (Atlas, por sus siglas en inglés). Este sistema consta de cuatro telescopios capaces de escanear completamente el cielo nocturno una vez al día. Gracias a esto desde el 2017 se ha logrado detectar 779 asteroides cercanos, 79 de los cuáles son potencialmente peligrosos, así como 71 cometas.
Según la NASA por lo menos en los próximos 100 años la tierra no se encuentra en peligro de alguna colisión catastrófica de asteroides. Aunque es posible que la mayoría de los objetos cercanos a nuestro planeta no acaben con la civilización, es necesario seguir monitoreando el espacio en la búsqueda del origen de algunos impactos que han tenido un resultado devastador en nuestro planeta.
En el hipotético y remoto caso de que algún cuerpo celeste se dirija a nuestro planeta, las agencias espaciales del mundo trabajan en distintas formas de desviarlo. Como parte de esta iniciativa se ha hecho la misión Dart, una prueba que tiene como objetivo tratar de redirigir un asteroide en septiembre, China también trabaja en una misión similar mientras que otras agencias tienen propuestas más extremas como usar bombas nucleares para destruirlos.
