Plutón, ese pequeño y misterioso objeto en el sistema solar, ha capturado la atención de muchas generaciones. Sin embargo, hace 17 años, este planeta enano sufrió una reclasificación, dejando de ser considerado como el noveno planeta del sistema solar. Esta decisión por parte de la Unión Astronómica Internacional (UAI) ha generado un intenso debate dentro de la comunidad científica y ha llevado a cuestionar la definición misma de lo que constituye a un planeta.
La reclasificación de Plutón y su impacto en la comunidad científica
En el año 2006, la UAI estableció la definición oficial de un planeta, donde se establecieron tres criterios fundamentales:
El primer criterio es que el objeto debe encontrarse en órbita alrededor del sol. El segundo criterio dicta que el objeto debe tener suficiente masa para mantener una forma equilibrada mediante la gravedad, es decir, tener una esfera o forma similar. Por último, el tercer criterio establece que el objeto debe haber «despejado su órbita», es decir, tener utilizado su fuerza gravitatoria para eliminar o barrer cualquier otro objeto en su órbita.
Plutón cumple con los dos primeros criterios, ya que se encuentra en órbita alrededor del sol y tiene una forma casi esférica. Sin embargo, es el tercer criterio el que provocó la reclasificación. Aunque Plutón comparte su órbita con otros objetos, como los denominados Plutinos, no ha «despejado» por completo su órbita de otros cuerpos, como los asteroides del cinturón de Kuiper. Basados en este último criterio, la UAI redefinió a Plutón como un «planeta enano».
El debate continúa: ¿Plutón debería ser llamado nuevamente planeta?
Esta reclasificación de Plutón generó una rápida controversia, ya que muchos científicos y astrónomos se opusieron a esta decisión. Argumentaron que la definición de la UAI dejaba excluidos a varios planetas del sistema solar, ya que en el espacio hay innumerables cuerpos celestes compartiendo sus órbitas con otros objetos.
La clasificación de Plutón como planeta enano condujo al reconocimiento de otros objetos del cinturón de Kuiper, como Eris, Haumea y Makemake. Estos objetos también cumplen con los dos primeros criterios, pero no han despejado por completo sus órbitas, lo que los excluye de la categoría de planetas según la definición de la UAI.
En la actualidad, el debate sobre la clasificación de Plutón como planeta continúa. Muchos astrónomos y científicos argumentan que la definición de los planetas debería basarse en características intrínsecas, como el tamaño y la composición, en lugar de en criterios relacionados con su órbita. Algunos incluso sugieren que Plutón debería ser reinstaurado como el noveno planeta del sistema solar.
A pesar de la controversia, la redefinición de Plutón ha tenido algunos beneficios. Permitió un enfoque más claro en la clasificación de los objetos en el sistema solar y condujo a un mayor conocimiento y exploración del cinturón de Kuiper. Además, esta reevaluación ha estimulado el interés público y ha generado una mayor participación en el campo de la astronomía.