El cerdo ibérico, protagonista de nuestras carnes
El cerdo ibérico es el protagonista indiscutible de nuestras carnes. Se cría en libertad en nuestras dehesas, alimentándose de bellotas y otros frutos que le dan un sabor característico a su carne. Además, la grasa infiltrada en los músculos confiere a las carnes ibéricas un sabor y una jugosidad únicos.
Variedades de carnes ibéricas
Existen diferentes variedades de carnes ibéricas en función de la alimentación y la crianza de los cerdos. El jamón ibérico de bellota es uno de los más apreciados, debido a que los cerdos son alimentados exclusivamente con bellotas durante la montanera, período en el que se produce la engorda antes de su sacrificio. También encontramos el jamón ibérico de cebo de campo, en el que los cerdos son alimentados con piensos naturales y se crían en espacios al aire libre. Por último, el jamón ibérico de cebo se obtiene de cerdos criados en granjas y alimentados con piensos.
Beneficios para la salud
Además de su delicioso sabor, las carnes ibéricas también ofrecen beneficios para la salud. Son ricas en ácidos grasos monoinsaturados, que contribuyen a mantener el equilibrio del colesterol y protegen nuestro sistema cardiovascular. También son una fuente importante de proteínas de alta calidad y contienen minerales esenciales para nuestro organismo.
Formas de preparar las carnes ibéricas
Las carnes ibéricas se pueden preparar de múltiples formas, desde platos tradicionales como el lomo ibérico a la brasa o la presa ibérica asada, hasta creaciones más innovadoras como los tacos de secreto ibérico marinados. Su versatilidad en la cocina permite combinarlas con una amplia variedad de ingredientes y especias, logrando así una explosión de sabores.
Además, gracias a su perfil nutricional, son una opción saludable. No dudes en disfrutar de estas carnes en todas sus variedades y preparaciones.
