El instituto USC, según un reciente análisis pudo concluir que el deterioro cognitivo puede retrasarse gracias a mejorar la calidad del aire y también puede minimizar el riesgo de desarrollar demencia en las mujeres. Estos resultados fueron revelados en la revista “Proceedings of the National Academy of Sciences”
Debido a que se desconocía los efectos al mejorar la calidad del aire y quizás la afectación que tendría sobre el sistema cognitivo, nuestro cerebro, se decidió promover este estudio. Dando como resultado que la constante exposición al aire contaminado se relaciona con el impacto que tiene en el desarrollo de la demencia.
Las mujeres mayores, las mas afectadas
La profesora Xinhui Wang sostiene que esta investigación es pionera en revelar como al estar en contacto de manera persistente con aire contaminado afecta a mujeres mayores, por el contrario, una disminución de aire contaminado trae beneficios a la salud del sistema cognitivo. Dato registrado por la Escuela de Medicina de Keck de USC.
El estudio realizado en 2.239 mujeres de entre 70 y 90 refleja que reducir considerablemente la exposición al aire contaminado promueve un envejecimiento sano del cerebro. Dicho estudio manifiesta que estos beneficios incluso favorecen a las mujeres que tienen un mayor riesgo de padecer demencia.
Podemos mencionar que los resultados arrojan que mejorar la calidad del aire se asocia a beneficios cognitivos más amplios y mejora la memoria de manera general, lo que nos indica que este cambio puede traer un efecto positivo en las múltiples regiones que subyacen al cerebro.
¿Cuál es el costo de esta enfermad que afecta nuestro sistema cognitivo?
En EE. UU la demencia incide y afecta de manera especial a las mujeres. Además, esta enfermedad está contada entre las más difíciles de costear por sus altos costos, según nos indica RAND Corporation.
La ex investigadora Diana Younan, que está asociada al departamento de Población y Ciencias de Salud Pública de a Escuela Keck y también coautora de esta investigación, nos indica que el Alzheimer y otras demencias relacionadas (ADRD) son excesivamente costosas para el ente de Salud y para las familias que luchan contra estas enfermedades en las personas mayores.
Para tener una idea, el alcance del costo de cubrir la demencia se posiciona entre los $159 mil millones y los $215 mil millones. Y se estima que para el 2040 se duplique esta enorme cantidad. Por eso, comprendemos la importancia de seguir avanzando en la descontaminación del aire y detener en gran medida las enfermedades relacionas con el sistema cognitivo.