La sonda Solar Orbiter debía realizar un acercamiento a la tierra antes de seguir su trayecto en dirección al sol. Este fin de semana completó con éxito esta etapa de su misión. La maniobra estaba llena de riesgos pues la sonda debía atravesar dos regiones pobladas de desechos espaciales.
La sonda Solar Orbiter es una nave cuya misión es estudiar el astro rey, es decir nuestro sol. La Agencia Espacial Europea (ESA) afirmó que la información recopilada a su paso sobre la tierra es de excelente calidad, pero que aún necesita terminar de ser procesada. La sonda fue lanzada en febrero de 2020 y desde mediados de este año está en fase de crucero.
Solar Orbiter logra la hazaña
La Agencia Espacial Europea había indicado que el sobrevuelo de la nave sería el más arriesgado hasta ahora para una misión científica. La sonda se acercó a la tierra el pasado sábado a poco más de 450 km sobre el norte de las islas Canarias y África.
Para acercarse al planeta la sonda debía atravesar dos regiones orbitales cargadas de desechos espaciales. La primera de esta región es el anillo geoestacionario de satélites a poco más de 35,000 km de la tierra. La segunda región es la colección de órbitas terrestres bajas a 400 km. El objetivo de este sobrevuelo era de mucha importancia a fin de disminuir la energía de la sonda y poder alinearla para su próximo paso en dirección al sol.
De esta manera comienza la misión principal de la sonda Solar Orbiter. El acercamiento a la tierra dio a la nave la oportunidad de estudiar su campo magnético, así analizar la interfaz de la atmósfera del planeta con el viento solar, el cual es una corriente constante de partículas emitidas por el astro rey.
Otras misiones
Tras un incidente en los preparativos de lanzamiento, la NASA confirma que el telescopio espacial James webb está listo para el vuelo. Los equipos de ingeniería hicieron pruebas adicionales para determinar si producto de la falla tendría algún defecto. Tras esta minuciosa inspección certificaron que el nuevo telescopio cumplirá con el itinerario previsto.
La NASA explicó que la liberación repentina y por accidente de una banda de sujeción, que asegura el telescopio al adaptador de vehículo de lanzamiento, provocó una vibración importante en todo el observatorio. La NASA tuvo que retrasar la fecha de lanzamiento del 18 al 22 de diciembre. Las agencias espaciales siguen con sus proyectos, y la ESA hace lo suyo con la sonda Solar Orbiter.